La tarde del sábado 17 de Diciembre de 2016, no será una tarde cualquiera para los amantes del fútbol correntino, especialmente para la gente del pueblo de Mandiyú y una vez más el estadio "Dr. José Antonio Romero Feris" del club Huracán Corrientes volvió a ser escenario de un hecho histórico como lo fue la primera incursión del mimísimo Deportivo Mandiyú en el Nacional B (tal el nombre de aquella época), luego en la Primera División de la AFA, al igual dque de Huracán Corrientes en la ahora Primera B nacional y posteriormente el fútbol de primera afista. Más tarde la consagración de Boca Unidos también ascendiendo a la Primera B Nacional y así sucesivamentetantas lindas historias para los tres clubes importantes de nuestro fútbol capitalino: Mandiyú, Huracán y Boca Unidos y ahora Mandiyú nuevamente.
Una multitud importante que rondó los 10 mil, 12 mil ó 13 mils aficionados no importa fue un sábado día laborable comercialmente, tal vez si el partido se hibiera jugado un domingo el gigante de cemento del barrio Berón de Astrada hubiera desbordado. Eso es hipótesis nada más.
Hay que decir que estuvo mejor organizado este espectáculo, con los accesos, tal vez hubo desborde en los sectores de plateas y en otros sectores. Todo nunca puede ser perfecto, pero se estuvo muy cerca. Estas son experiencias que hay que capitalizarlas.
Fue todo una fiesta, hubo festejos y un ascenso.
(Rra).
COMENTARIOS
A continuación damos a conocer los comentarios de cuatro de los cinco diarios (La República de Corrientes, no se edita los domingos) de la ciudad de Corrientes y de la ciudad de Rafaela de cómo vieron cada uno de los colegas que cubrieron el partido final entre Mandiyú y Ben Hur.
Mandiyú volvió a escribir una página gloriosa: ascendió al torneo Federal A
El Algodonero le ganó la final del federal B a Ben Hur de Rafaela. Ariel Reinero anotó el único gol a los 41 minutos del complemento.
Mandiyú hizo realidad su sueño de ascender al torneo Federal A ayer al ganarle a Ben Hur de Rafaela por 1 a 0, en una tarde histórica para el fútbol correntino. El gol lo anotó el delantero nacido en Córdoba, Ariel Reinero.
Pasó casi una década para que sucediera un episodio como éste, que fue presenciado por cerca de 12.000 personas en la cancha de Huracán Corrientes.
Esta página histórica para el deporte se dio en un sábado muy caluroso, con 33º de temperatura. Los hinchas tomaron la precaución, y al menos una hora antes ya la cancha azulgrana lució colmada a excepción de la tribuna detrás del arco, por Teniente Ibáñez. En ese lugar unos 75 simpatizantes del equipo visitante fueron ubicados.
La salida de los jugadores algodoneros fue una verdadera fiesta con papelitos, cánticos, expresando la alegría de estar disputando otra vez después de muchos años una final en el torneo Federal B.
En ese marco, a los 30 segundos cuando recién se acomodaban en el campo de juego, el rápido Diego Monzón sacó un remate que besó el poste. Salió a ser protagonista Mandiyú, como era previsible. Y otra vez a los 4’, en dos oportunidades se perdió la conquista, primero Martín Kuchack, que sacó un tiro cruzado que le sirvió Reinero, y posteriormente a Gonzalo Ramírez le quedó de cabeza, pero el arquero de Ben Hur, Gustavo Cordera, salvó su valla.
Ben Hur tenía previsto un 4-3-3, y su entrenador decidió cambiar y atacar con dos delanteros, uno de ellos volvía a la titularidad como es Matías González, quien más peligro llevó al arco de Jamil Jara.
Con Palma a última hora ingresando al once para la salida de uno de los atacantes del tridente santafesino (Jonathan López), el equipo golpeó en especial a espalda de los marcadores, sobre todo por el lado de Diego Coronel, el sector izquierdo.
Pero el local manejó los hilos del juego; de tres cuartos de cancha, sobre todo con Diego Monzón, molestó muchísimo a los defensores. “Sidra” estuvo imparable, por eso a los 30’ volvió a tener otra chance de gol, una individual en ataque y por poco su remate salió afuera. Es cierto, también Kuchack y Reinero aguardaban en el área chica de Ben Hur.
El público se mostró entusiasmado por la ráfaga en ofensiva del equipo, que contó con al menos tres ocasiones ya en media hora de partido para abrir el marcador. Dos minutos después, otra vez Monzón -delantero ex Curupay y Fontana de Chaco- fue protagonista por la izquierda de una nueva oportunidad pero su tiro se fue lejos, mientras que su compañero Ariel Reinero, se molestó porque no alcanzó a pellizcar para empujarla en el arco del buen arquero de Ben Hur.
A los de Pablo Suárez les faltó ajustar la última puntada. Ben Hur cuando salió del asedio del local fue siempre, porque esperó de contra. A los 38’ se amañó el atacante González y le complicó al zaguero central Juan Pablo Rodríguez, que cometió el foul. El visitante ganó un tiro libre cerca del semicírculo del área de Jara, pero lo desaprovechó.
Nuevamente los espacios a espaldas de los volantes de Ben Hur aparecieron para los correntinos, que de un centro de Monzón encontró a Kuchack, que muy solo apareció para empujarla a la red. Sin embargo, el línea invalidó la jugada por la posición fuera de juego del Tanque. Se lamentó la gente, que a esa altura no podía comprender cómo Mandiyú no podía hacer la diferencia y desperdiciaba las chances de gol.
Ben Hur para nada mostró lo hecho en la ida en Rafaela, en especial en el primer tiempo, que por la acción del arquero de Mandiyú no pudo sacar diferencia. El intenso calor y el estar demasiado parado para la contra hicieron que los primeros 45 minutos sean todo del conjunto correntino.
En el complemento, a los 7’ nació otra jugada desde la salida con Coronel, quien sacó un pelotazo fuerte para Kuchack, éste le ganó al marcador rival pero no le pudo dar bien en el remate, que se coló por detrás de la red del arco. Un minuto después, justamente en esa pegada quedó con molestia el goleador de Mandiyú en el campeonato, y dejó la cancha para el ingreso de César Molina.
Bajó el aliento para el Chacarero, que siempre que entró en el complemento le dio alegría al equipo. Uno recuerda aquel gol agónico en la fase de grupo ante Ferroviario, que fue el empate 1 a 1 para el Algodonero y justamente el atacante nacido en San Luis del Palmar, ni bien ingresó tuvo en sus pies la posibilidad de gol pero no se pudo acomodar bien en el área chica y el tiro se fue lejos.
A esa altura ya mereció estar al frente Mandiyú, pero la falta de definición en la última puntada le negó el gol a Monzón y ahora a Molina.
Ben Hur adelantó sus líneas, sin embargo el local ganó a los 15’ un contragolpe que Gonzalo Ramírez lo desperdició. Los hinchas pedían impacientes “Albo pongan huevos”, porque corrían los minutos del juego. Nadie podía pensar en los penales, acaso porque Mandiyú hizo todo el esfuerzo futbolístico, fiel al estilo de juego al ras del piso.
Pasando los 20’ se lesionó Diego Monzón, quien era el más desequilibrante en el ataque, e ingresó Julio Sena. Con lágrimas fue la salida de “Sidra”, seguramente emocionado como todos los futbolistas por lo que se estaba viviendo.
Sena, un juvenil con la característica de ser ágil y rápido, dejó desacomodada la defensa, pero un defensor de Ben Hur llegó a salvar en la línea su remate débil de frente al arco.
Cuando se acercaba el final del partido logró romper la paridad Ariel Reinero. A los 41’, el cordobés aprovechó que el balón quedó bollando en el área chica para desacomodar al arquero Cordera y luego a los defensores, y anotar el gol del ascenso correntino. s
REINERO Y EL GOL DEL ASCENSO, QUE HIZO DELIRAR AL ESTADIO COLMADO DE HINCHAS ALGODONEROS.
EL FESTEJO DEL PLANTEL ALGODONERO, JUNTO AL ENTRENADOR Y LA COMISIÓN DIRECTIVA DEL CLUB, QUE TRAS GANARLE LA FINAL DEL TORNEO FEDERAL B 2016 A LOS SANTAFESINOS, DIO LA VUELTA OLÍMPICA ANTE SU GENTE.
EL JOVEN ÁLVARO PAVÓN, LA REVELACIÓN DEL EQUIPO CORRENTINO. SU LABOR DE AYER, SIN NICOLÁS FERREIRA, EL SOCIO DEL MEDIOCAMPO, FUE PARA DESTACAR .
LA HINCHADA DE MANDIYÚ QUE COLMÓ EL ESTADIO HURACÁN CORRIENTES. UNA NUEVA GENERACIÓN VIVIÓ AYER UNA ENORME ALEGRÍA, QUE HIZO RECORDAR A LOS VIEJOS TIEMPOS.
PERIODISTA MARÍA MÉNDEZ
FOTOS JOAQUIN MEABE
El Albo le ganó 1-0 a Ben Hur de Rafaela y se adjudicó la llave final Ascenso 3 del torneo Federal B. Respaldado por una gran convocatoria que se dio cita en el estadio de Huracán Corrientes, debió esperar hasta el minuto 41 del segundo tiempo, cuando Ariel Reinero concretó el gol del añorado ascenso.
DIEGO ACEVEDO
deportes@ellitoral.com.ar
El “monstruo” finalmente despertó y recuperó una parcela de ese terreno que supo ganarse en sus años dorados, tan presentes en la añoranza de los simpatizantes de Mandiyú. De aquellos que lo vieron jugar en primera división y también a quienes el relató les llegó por boca ajena pero terminaron apropiándose del mismo. El “monstruo”, como lo calificó Pablo Suárez, ex jugador y actual entrenador del club, palabra autorizada y nexo vivo entre ese recordado ayer y esta actualidad de celebración, dado que el Albo con agónico gol de Ariel Reinero derrotó 1-0 a Ben Hur de Rafaela y concretó su ascenso al torneo Federal A, tercera categoría del fútbol nacional.
Luego de la igualdad sin goles en suelo rafaelino el partido de vuelta de la final de la llave de Ascenso 3 del torneo Federal B se jugó ayer ante una concurrencia estimada en 13 mil espectadores que prácticamente colmaron las instalaciones del estadio de Huracán Corrientes.
Probablemente empujados por la euforia y la efervescencia que se vivía desde horas tempranas, los futbolistas del Albo salieron decididos a encaminarse rumbo al ascenso. La apuesta del entrenador de sumar un hombre más a la línea de ataque dio rápidos síntomas positivos en el juego, ya que a los 30 segundos Juan Martín Kuchack fue a luchar una pelota y el balón le quedó servido a Diego Monzón, recostado en la derecha del ataque, y el disparo del tercer elemento ofensivo se estrelló contra el poste izquierdo del arco rafaelino. Al rato Kuchack ensayó una tijera que obligó a la reacción del arquero Marcos Cordero y en el rebote Gonzalo Ramírez de cabeza desaprovechó la oportunidad de convertir.
Debieron pasar algunos minutos para que Ben Hur pudiera salir del acoso del local y lo hizo gracias a la buena labor de Nicolás Monje y Matías González, quienes construyeron una pared por la banda derecha y el disparo del carrilero se fue apenas desviado. Más tarde González -muy movedizo- se recostó por la izquierda, enganchó hacia el centro y sacó un disparo cruzado que sacudió los nervios de los seguidores del Albo.
Pero en líneas generales el dominio del pulso del juego perteneció al local, a quien la presencia de Monzón le dio buenos frutos, aunque sin lograr romper el cero en la serie. En velocidad y a la carrera el delantero se sacó la marca de Gustavo Mathier de encima e intentó sorprender con un disparo al primer palo pero Cordero respondió con solidez. Más tarde capturó un balón que quedó dando vueltas en el área del Lobo sin poder empujarla al gol, ya que su disparo se fue muy ancho.
Algunas complicaciones pusieron a prueba al Albo, que a los 9 minutos del segundo tiempo perdió por lesión a su goleador Kuchack, quien debió abandonar el campo de juego luego de golpearse el tobillo al sacar un remate que se fue alto. César Molina fue convocado el juego y se activó casi de inmediato con una media vuelta que estuvo cerca de terminar en gol. Más tarde Monzón correría con la misma suerte que el Tanque y en su lugar ingresó Julio Sena, que también se adaptó rápido al juego y en una acción se asoció con Gonzalo Ramírez, quien avanzó hasta posición de gol, y se topó con una firme respuesta del arquero visitante.
Gustavo Barraza, DT del Lobo, tomó nota de los movimientos de Ramírez y mandó a la cancha a Jonathan López, para atacar con tres y de paso buscar contener al inquieto carrilero. Ben Hur ya no conseguía el caudal de juego que logró por algunos pasajes del primer tiempo, más allá que en un disparo de Gastón Palma exigió por demás a Yamil Jara.
El juego como en un embudo parecía desembocar en un gol de Mandiyú, aunque ¿quién sería el encargado de anotar después de tantas ocasiones malogradas?
Sena estuvo a punto de convertirse en el héroe pero Facundo Rodríguez despejó casi sobre la línea de gol cuando el chico había vencido a Cordero.
Hasta que a los 41 minutos apareció Ariel Reinero, el cordobés que tuvo una errática tarde y a quien parecían no salirle las cosas. Pero el delantero tenía reservada una bala de plata y la utilizó cuando se hizo de una pelota que quedó dando vueltas en el área de Ben Hur (habían luchado por ella Molina y Sena), y con un potente remate cruzado se llenó la boca de gol y contagió su grito a las 13 mil gargantas presentes en el escenario del Berón de Astrada quienes comenzaron a celebrar el ascenso que unos minutos después terminó por consumarse.
Por tradición y convocatoria, el Albo se merecía una alegría como esta. Logró subir un escalón en el mapa del ascenso argentino. Deportivamente el plantel dio más que la talla. Dependerá de quienes conducen la institución que lo conseguido pueda persistir en el tiempo como aquellas viejas hazañas del club.
Mandiyú cristalizó su
gran sueño de ascenso
Diario El Libertador: Mandiyú es uno de los cuatro clubes del país que logró pegar el salto de categoría y el año venidero militará en el Torneo Federal A, certamen que organiza el Consejo Federal.
El gran desahogo llegó a pocos minutos para el cierre del partido. Una jugada que se ensució en el área, un defensor que intentó cerrar y la pelota que terminó pegando en el pie goleador de Ariel Reinero para incrustarse en el arco visitante. El grito de gol, atronador en el "Gigante" del Berón de Astrada, sacudió cada uno de los cimientos del vetusto escenario deportivo. Las cerca de 13 mil almas buscaban al socio para festejar en un interminable abrazo y "Dale Albo" y enseguida nomás "Dale Campeón" fue un verdadero trueno en la soleada tarde correntina.
El gol llegó en un momento donde nadie quería equivocarse. Restaban pocos minutos para la finalización del juego y el camino a los penales parecía cosa juzgada. Sin embargo la guapeza de Julio Sena para llegar y mandar el centro que terminó despejando a medias un defensor y Reinero la empujó con más suerte que intuición y fue el gol del campeonato.
Mandiyú lo tuvo para convertir en la primera mitad y también en la etapa complementaria. En los primeros diez minutos el arquero Marcos Cordero le tapó tres remates claros a los delanteros de Mandiyú y, cuando no pudo intervenir el travesaño y un remate desviado de Diego Monzón, le terminó dando vida al once rafaelino.
Antes del minuto de juego Monzón le pegó cruzado ante el achique del uno visitante y la pelota pegó en el travesaño y salió hacia un costado del campo de juego. Después Martín Kuchak, asistido por Reinero, ensayó un disparo que encontró buena respuesta del uno y el rebote le quedó a Gonzalo Ramírez que con golpe de cabeza exigió a otra fantástica reacción del uno de Ben Hur.
Promediando la etapa "Sidra" Monzón tuvo dos chances claras pero no pudo embocar al arco y, en la restante, Cordero le tapó un remate abajo y envenenado al delantero.
Ben Hur, inquieto con Matías González, intentó por las bandas (las dos), siempre le creó problemas a sus marcadores y sus centros terminaron desnudando falencias en la última línea local.
En el complemento González tuvo una clara, pero al ingresar al área, y apuntar al arco apareció Alvaro Pavón (otro de rendimiento alto en gran parte del campeonato) para poner la pierna salvadora.
Antes de la apertura del marcador, Julio Sena definió ante la salida del uno rival y su remate fue sacado en la línea por un defensor que cerró cuando todo el estadio ya cantaba gol.
La pelota tiene destino de gol. Los correntinos comienzar a rugir, los rafaelinos ya la padecen. El grito sagrado vale un ascenso.
Triunfo y consagración de Mandiyú, dando un salto de categoría en su afán de volver a figurar en el gran contexto nacional deportivo.
Mandiyú le ganó en la agonía a
Ben Hur y festejó con el ascenso
Diario época: Traspasaban los 41 minutos del segundo tiempo cuando la arremetida Ariel Reinero provocó el gol del triunfo ante el “lobo” rafaelino. Al cabo, explotó de alegría el público que llenó la cancha de Huracán. El Federal A será el próximo desafío para este “albo” revitalizado.
Mandiyú pretende emular la historia del Ave Fénix y resurge de sus cenizas. Ayer venció a Ben Hur, de Rafaela, por 1-0 y logró el ascenso al Federal A, dejando atrás más de 20 años de sinsabores. El abrazo con los ojos vidriosos de un padre con su hijo, quien seguramente creció escuchando leyendas vinculadas al “albo” de los 80 y 90 -cuando competía en la primera división del fútbol argentino-, resumía la emoción que se vivió en una cancha de Huracán exultante, colmada por unas doce mil personas.
Ariel Reinero fue el que transmutó de villano a héroe. Porque el delantero cordobés tantas veces resistido por la hinchada fue quien de arremetida hizo que el rechazo de Nicolás Besaccia rebotara en él y así sorprenda la resistencia de Marcos Cordero. Iban 41 minutos del segundo tiempo y la parcialidad correntina vibró con el gol que sirvió para desnivelar en la serie final de la llave Ascenso 3 del Federal B.
El mismo Reinero, quien después del empate sin goles en Rafaela el domingo pasado sostuvo: “Tenemos la suerte del campeón”.
Y claro, la había pasado mal Mandiyú en el cotejo de ida, sobre todo en una primera mitad que lo tuvo como gran figura al arquero Jamil Jara.
El que festejó con el gesto del Topo Gigio hacia la platea, como señal de desahogo también. Esa conquista fue el mejor regalo para ofrendarle al técnico Pablo Suárez, quien siempre lo bancó y hoy cumple 50 años. El mismo Suárez que como jugador lograra el salto a la máxima categoría con Deportivo Mandiyú en 1988.
También el ascenso fue el “obsequio” más preciado para el capitán del equipo, Nicolás Ferreira, quien ayer cumplió justamente 25 años y si bien fue uno de los puntales en la campaña del ascenso, no pudo jugar la revancha ante Ben Hur por estar suspendido (cinco amarillas).
Decidido a no dejar pasar la oportunidad, apenas habían transcurrido 30 segundos cuando sacó largo Jara, la peleó Kuchack y de primera Reinero habilitó a Monzón, quien casi cayéndose remató y estrelló el balón en el palo izquierdo de Cordero, recorriendo todo el ancho del arco, salvándose Ben Hur.
La intención de plantarse en campo rival dio nuevamente frutos a los 5’, porque no la dio por perdida Monzón y pudo enviar el centro de zurda que conectó Kuchack y tapó Cordero; el rebote derivó en el cabezazo “bombeado” de Ramírez y nuevamente surgió el 1 del “lobo” rafaelino para ahuyentar el peligro. Ese arranque furioso de Mandiyú contagió a la gente, que vitoreó en cada acción que denotaba la mejor actitud del “albo”.
Sin embargo, Ben Hur, aun cuando no pudo asumir un rol protagónico, también tuvo las suyas. A los 10’, Monje combinó con González, quien tras eludir a un hombre se la devolvió a Monje pero su posterior tiro se fue por encima del horizontal. Dos más tarde, el que se desprendió por izquierda fue Pautasso y su buscapié por poco no logró desviar Monje, quien sorprendió llegando en diagonal a espaldas de Coronel.
De a poco se fueron alternando el dominio del balón en la mitad de cancha y el calor también hizo mella ante el esfuerzo físico de los jugadores. Por eso, recién llegando a la media hora de juego Monzón sacudió la modorra con un disparo rasante desde el borde del área que mandó al córner Cordero tapando abajo a su derecha.
Otra vez lo tuvo Monzón a los 32’, cuando Besaccia falló de cabeza y lo habilitó, pero el delantero “albo” no se decidió a pegarle al arco o tocar con Reinero que llegaba por el centro y su tiro salió desviado.
Antes de concluir la etapa, Kuchack pareció destrabar la paridad con un cabezazo tras tiro libre de Pavón, pero el segundo asistente Guillermo Infante marcó posición adelantada.
Luego del descanso largo, la primera fue de Mandiyú a los 9’. El bochazo de Coronel permitió el pique habilitado de Kuchack, quien llegó exigido y remató desviado ante el esfuerzo de Besaccia en el cierre. Se agotó el tiempo en cancha del “Tanque”, quien fue reemplazado por César Molina y en la primera que tuvo, ensayó una volea de espaldas que se fue ancha.
No obstante, Ben Hur tuvo dos muy claras. Porque a los 16’ Palma se encontró con libertad para pegarle desde más de 20 metros y el pique previo complicó a Jara, quien no pudo contener y el rebote cayó en el techo del arco. En tanto, a los 32’, la secuencia de toques entre González y López finalizó en Sergio Rodríguez, quien desde la medialuna le dio “mordido” llegando a obstaculizar el remate Álvaro Pavón, uno de los que desplegó fútbol en cada toque.
Pero avisó Mandiyú cuatro más tarde. Molina se la bajó a Sena, quien quedó mano a mano pero su definición fue despejada sobre la línea de gol por Facundo Rodríguez.
Hasta que llegó el momento decisivo. Molina discutió de cabeza, se la quedó Sena y tras enganchar, intentó rechazar Besaccia pero se interpuso Reinero y terminó empujando al gol. Entonces, se produjo el delirio de todo Mandiyú, que luego aguantó el resultado y se reencontró con la gloria del ascenso luego de más de 20 años. Es momento de celebrar, para después pensar lo que será el desafío del Federal A.
El sueño se truncó al final
Diario La Opinión de Rafaela: Ben Hur perdió 1 a 0 en la segunda final en Corrientes ante Mandiyú y no pudo ascender al Federal A. El gol fue de Ariel Reinero a los 41' del complemento. El Lobo había tenido a Cordero y su defensa como figuras, pero por muy poco no pudo llegar a los penales.
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1 / 2 - FOTO EL LITORAL NO PUDO SER./ Luego de un partido típico de una final, el Lobo cayó cuando se ilusionaba con los penales. SALDO POSITIVO./ La campaña permitió jugar una final luego de 11 años.
(Especial para LA OPINION). - A cuatro minutos de completarse los segundos '90 de la final por el ascenso 3 del Federal B, Ben Hur se quedó con las manos vacías. Había sostenido con sobresaltos un cero en su arco que lo llevaba hasta los penales. Pero apareció Reinero y se derrumbaron sus ilusiones de retornar a la tercera categoría del fútbol argentino.
En la calurosa tarde correntina, con 36 grados de sensación térmica, el equipo rafaelino arrancó un tanto frío. A los 30 segundos, Reinero habilitó por derecha a Monzón, que avanzó unos metros y sacó un fuerte remate que pegó en el palo y cruzó toda la línea cuando Cordero había quedado fuera de escena.
Mandiyú quería llevarse por delante al Lobo empujado por las más de 13.000 personas presentes en el estadio. Y con esa postura a los 3 minutos obligó a una doble tapada de Cordero ante Kuchack (ligeramente adelantado cuando recibió), y luego del rebote en el cabezazo de Ramírez. Estas situaciones daban la sensación que se estaba planteando, pero a la inversa, lo sucedido en el partido de ida cuando BH había sido muy superior en el primer tiempo.
El elenco de Pablo Suárez sustentaba la supremacía en el trámite por el buen trabajo de Pavón en la mitad de la cancha y por la peligrosidad de Diego Monzón, tirado sobre la izquierda. Por ese momento del partido, el cambio de esquema propuesto por el local (sin enganche y con tres puntas), parecía redituar más que el ensayado por Barraza, con Palma en la formación titular por Jonathan López manteniendo en el once titular a quien fue una de las figuras en la ida.
Al conjunto rafaelino le llevó 20 minutos aproximarse con riesgo a la valla de Jara. Fue con la primera aparición importante de Matías González, que después de enganchar para el medio le dio cruzado y el remate se fue muy cerca del segundo palo.
Así, de a poco intentó ganar metros en la cancha el Lobo para dividir la tenencia de la pelota. No estaban del todo precisos los volantes, pero cuando Sergio Rodríguez podía descargar como lo hace habitualmente, y González tenía la cancha de frente, era otra la postura de BH en ofensiva.
Así se fueron generando algunas acciones a balón detenido. En un córner, el anticipo de Autino se fue apenas desviado como para que la defensa correntina empiece a preocuparse del mismo modo en esas situaciones.
De todos modos, como es importante Sergio Rodríguez en Ben Hur a la hora de hacer de pivot, más allá de su aporte dentro del área, también lo es Kuchack en Mandiyú. El tanque local cuando podía anticipar, le traía complicaciones a Besaccia y Kummer.
Monzón volvió a aparecer en la media hora, cuando tras eliminar a Mathier, sacó un remate que desvió con lo justo Cordero al córner.
En ese primer tiempo, hubo otra aproximación benhurense, nuevamente con González, que pudo recibir en tres cuartos de cancha y encarar con espacios, sacando un remate que se fue cerca del travesaño.
En el comienzo del segundo tiempo el partido estaba más lento. No obstante, tras un rechazo largo de Coronel, antes de los 10 minutos Kuchack quedó mano a mano con Kummer, pero su remate se fue desviado. En esa acción el goleador correntino se resintió de una lesión en el tobillo y se retiró reemplazado por Molina, que en la primera que tocó estuvo cerca de la apertura con una media tijera.
Con el correr de los minutos, las piernas fueron sintiendo el trajín por la alta temperatura y la presión de una final.
Luego de los 25' intentó arreciar otra vez la ofensiva correntina, pese a que también había perdido por lesión a otro atacante de muy buen rendimiento, como Monzón. Primero con un remate débil de Reinero desde buena posición a las manos de Cordero, y luego con una buena contención del arquero rafaelino ante una jugada individual de Ramírez.
Ben Hur quedó parado con su esquema habitual a partir del ingreso de Jonathan López por Monje, lo cual tenía también la intención de evitar un poco el despegue de Ramírez, que traía complicaciones para BH. Cordero volvió a intervenir luego de un cabezazo de Sena, en centro de Barrios Alfonso.
El objetivo benhurense era tratar de aguantar lo poco que restaba para ir a los penales. Y estuvo a punto de lograrlo, pero falló en el área y esta vez Reinero no perdonó. El delantero oriundo de San Francisco (Córdoba) capitalizó un rebote y venció al joven arquero rafaelino cuando iban 41'.
Casi no le quedó tiempo al equipo de Barraza para ir por el empate. Forzó algunos pelotazos al área, donde Jara y el libero Juan Pablo Rodríguez fueron muy seguros. Y después de 5 minutos de descuento, el árbitro Rivero con su pitazo final desató la euforia correntina.
Ben Hur cayó de pie, dando pelea hasta el final. Hizo un gran torneo, pero se quedó sin gol en los últimos cuatro partidos (de manera increíble en la final de ida, cuando hizo muchos méritos para ganar) y en el último, el decisivo, le salió caro. No obstante, hay que ver también otros aspectos positivos, como por ejemplo jugar una final luego de 11 años. Eso debe darle fuerzas para intentarlo con más fuerza en el próximo torneo.
Ben Hur se quedó en las puertas
del ascenso tras caer en Corrientes
Diario Castellanos de Rafaela: Con un gol agónico de Ariel Reinero para el Algodonero a 2 minutos del final del partido y cuando la historia se encaminaba a los penales, el equipo de Gustavo Barraza se quedó con las manos vacías en tierras correntinas en una serie que fue muy pareja entre dos rivales que fueron de los mejores en sus zonas. Vendrá ahora el tiempo de los balances, pero está claro que este 2016 debe quedar en el anaquel de los mejores recuerdos de la institución.
Foto: Castellanos / Diario Epóca
Nicolás Domenella – Descolgando una de las tantas frases futboleras, dicen que cada partido debe tomarse como una final. Este sábado literalmente los jugadores tanto de Mandiyú de Corrientes como de Ben Hur salieron a vivir una final. Y digo vivir asimilando esta palabra con lo que se aparenta al vocablo disfrutar, incluso por encima del resultado deportivo que decoró la jornada y que es, en definitiva, lo que perseverará en el recuerdo indeleble de los hinchas, en este caso, correntinos más que nada.
El estadio de Huracán volvió a lucir como en sus mejores épocas. Como aquellas tardes de la década del ochenta asomándose a los principios del 90 cuando el fútbol correntino se codeaba con los grandes. Una multitud colmó el “José Antonio Romero Feris” que cerró sus puertas media hora antes del inicio como se había anunciado, por lo que el gentío que desbordó las tribunas no se perdió un segundo de lo que estuvo a punto de ser una hazaña de Ben Hur
Por tan sólo dos minutos. Sólo porque a Ariel Reinero se le ocurrió pararse en el momento justo en el lugar menos indicado decretando el único gol que terminó con las ilusiones de la BH. Resulta muy difícil hablar del partido en sí, o de la serie toda; o del campeonato ya que los correntinos también encontrarán sus argumentos para sostener el ascenso conseguido, pero no por ello queda un sabor de injusticia en el paladar rafaelino, más aún luego de tremenda campaña de la mano de Gustavo Barraza.
El partido
El juego arrancó con todo. Pero con todo en serio. Ben Hur sacó del medio y rápidamente la perdió en la medialuna del área propia; Monzón se filtró por derecha y remató contra el palo de Cordero que no llegaba pero la fortuna se vistió de Ben Hur esta vez ya que el balón recorrió toda la línea y no se quiso meter cuando se jugaban apenas 30 segundos.
Antes delos 5 minutos Cordero ya se había tenido que revolcar dos veces. Y en ambas por culpa de Monzón otra vez. El extremo se juntó con Kuchak tras escaparse de Besaccia y puso la pelota de cabeza entre líneas a la espalda de Kummer para que el 7 conectara exigiendo una estupenda tapada del portero rafaelino.
La más clara de Ben Hur, en respuesta, llegó sobre los 10´. Pautasso cruzó rápido un tiro libre para González que descargó para que Monje remate con cierto peligro pero sin mucha dirección hacia el arco de Jara. Un minuto más tarde González, esta vez de perfil zurdo, sacó su tiro con más peligro sobre el 1 correntino pero no acompañó nadie ese trayecto como para empujar.
La polémica de la tarde esta vez lo perjudicó a Mandiyú cuando el segundo asistente de Rivero anuló un bonito gol de Martín Kuchak por una supuesta posición adelantaba que dejó más dudas que certezas. En la réplica, la BH encontró otra vez descompensada la última línea del Verde y cuando Mathier tiró un centro paralelo a la raya del fondo Autino no llegó por poco nomás a empujarla.
En medio de los últimos minutos calientes, no sólo por el clima sino por algunas piernas fuertes, Reinero probó de afuera al seguro Cordero que la tiró al corner con mucho esfuerzo. Finalmente, entre Palma de pelota parada en la barrera, y Monzón con el suyo propio, terminaron de sellar un primer tiempo que al igual que en Barrio Parque 6 días antes también había finalizado con el dueño de casa siendo superior sin poder cristalizarlo en la red.
Segundo tiempo
El complemento no mostró variantes de parte de los técnicos de entrada en cuanto a nombres. A diferencia de la primera etapa, en esta ocasión tardó un poco más en armarse la cosa. A los 5´ Kuchak dispuso de la más clara hasta ahí tras tomar un pelotazo en mitad cancha de Facu Rodríguez que se quedó pensando en el achique. El delantero se demoró un poco y pateó muy mal ante Cordero. Inmediatamente Suárez mandó a Molina por Kuchack y en la primera que tocó el ingresado casi factura luego de ensayar una pirueta en el área cuando lo tomaban de la camiseta.
El juego era realmente atrapante. El Algodonero iba e iba pero fallando siempre en la estocada final. Encima Palma le mojada la oreja con una remate de lejos que Jara sacó con mucha fortuna luego de que se viera encandilado por el sol.
Los cambios se sucedieron pero dieron mejor rédito en el local. Molina fue complicando cada vez más a la defensa rafaelina y Reinero crecía en confianza. Fue tal la confianza que ganó el delantero que a tres del final, apareciendo por izquierda, metió el freno de mano a tiempo dentro del área chica para que Mathier pasara de largo, su remate dio en Cordero y el rebote lo favoreció el mismo delantero que esta puso el empeine para el otro lado mandado la pelota al techo de piolas decretando el gol, y el ascenso del correntino.
Con esa acción de murió el partido para los de Barraza y con él las ilusiones. El pitazo de Rivero sentenció la historia y la triste realidad envolvió a los jugadores del Lobo y al puñado de hinchas que desafió la prohibición porque a Ben Hur se le escurrió de los dedos en una serie pareja que, da la sensación, se resolvió en Rafaela. Sin embargo y a pesar del lógico dolor, los protagonistas deben saber que hicieron las cosas en el año, no sólo en el semestre, muy bien poniendo luego de casi una década a Ben Hur otra vez en una final. Luego de los balances, ya vendrán las revanchas.
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