Sofocante calor no fue apto para que se jugara a la siesta

No es descubrir nada si mencionamos que el calor, si bien apenas estamos a días para el inicio de la primavera, en esta parte del país se siente de sobremanera. Sin embargo, creemos factible, que en razón de las mejoras que se vienen anunciando en los estadios que albergan fútbol en nuestra Capital, más aún en lo lumínico con la instalación de luces led, bien debieran pensar ya en programarlos en horario nocturno. 

La alta temperatura que se dio este domingo era algo previsible. Se sabía que iba a superar la barrera de los 30 grados y las condiciones del clima también serían óptimas. Pero, a las 14, horario en que comenzó el primer choque semifinal del torneo Oficial de primera división B de fútbol, siendo sinceros, no se podía jugar. El sol más el calor, calcinaban la tierra. 
Realmente, era inhumano que lo hicieran. Y, sin embargo, a los dos planteles, tanto de Talleres como de Barrio Quilmes, obligados es verdad, no les quedó otra que salir a la cancha y afrontar los más de 90 minutos, corriendo detrás de la pelota. Incluso, hay que decirlo, el calor no amainó para gran parte del desarrollo del segundo compromiso, que sostuvieron posteriormente, Curupay y Peñarol. Y, pese a todo, se jugaron igual.
Aunque, lo bueno pasó porque muchísima gente aficionada y, obviamente, también Eventos & Marcas como prensa, siendo el único medio que los cubrió, se dieron cita para presenciar estos encuentros en el estadio de Ferroviario. Y, lógicamente, debimos estar todos bajo los rayos calientes del astro rey.
Entendemos, han superados las 1300 personas. Entre ellas, una madre muy jovencita con un bebito de días o apenas meses. La gráfica es muy elocuente, la convocatoria que asistió a presenciar las semifinales. Locos o apasionados, juzguen o cataloguen ustedes lectores cibernautas, como mejor entiendan o les parezca.
Imaginen si se jugaran las revanchas de estos cruces que catapultarán a los dos finalistas y también a los dos que ascenderán, en horario nocturno. Es innegable que, serían más los simpatizantes que asistirían. E indudablemente, la recaudación habría de ser mayor. Por dos razones fundamentales, la primera: ya fuera de jornada laboral y, lo segundo: por ser más agradable y algo fresco.
Fotografía: Gentileza Prensa LCF.