Evalúan amputarle dedo a efectivo policial

El agente en cuestión, Sargento Sergio Ojeda pertenece al grupo de Escuderos de la Policía. Y, en la refriega que se diera con simpatizantes, en su gran mayoría familiares de los jugadores de Barrio Quilmes, en la jornada del sábado en el estadio de Ferroviario, sufrió un corte en un dedo de sus manos ante lo cual, se encuentra internado en una clínica donde los profesionales médicos, por estas horas, según se nos informara, analizan la posibilidad de amputárselo. 

Tal novedad, si bien no deja de provocar indignación, considerando el cuadro de situación por el que está atravesando el efectivo policial quien durante el curso de los hechos, cumplía con su deber, debiera llamar la atención e invitar a la reflexión. Interpelar no sólo como sociedad a aquéllos simpatizantes del fútbol, como asimismo, a la misma fuerza policial, en su conjunto. Porque, aunque uno tenga parte de culpa, es sabido que la contraparte, también. Igualmente, nada justifica ningún tipo de violencia. Ni la más mínima equivocación, como tampoco, artera provocación o incitación para generar desmanes con actos de ninguna naturaleza.
Es lamentable, que como medio de prensa periodístico deportivo, tal el caso de Eventos & Marcas, tanto en la víspera como en la jornada de hoy, tengamos que hacer reseña de acciones de esta envergadura. Fundamentalmente, porque insistimos, ningún fin justifica los medios.
Ni los abusos de poder, como asimismo, las intempestivas reacciones, en el peor de los casos. Lo vivenciado, el pasado sábado, fue una locura total. Incomprensible a todas luces, porque durante el partido y luego en la definición de los penales, todo transcurrió por carriles normales. No hubo tan siquiera, atisbos de que pudiera apenas minutos después, desatar irracional situación de descontrol.
Pero, así como en la víspera, fui duro en mi crítica dado el mal accionar de los policías, que dejo bien en claro, no cambia en nada al día de hoy mi forma de pensar, nobleza obliga, debo referirme al estado de situación por el que está pasando el efectivo de la fuerza policial, sargento Sergio Ojeda. Lamento profundamente y, al mismo tiempo, me solidarizo como ciudadano de bien, que esté corriendo el riesgo de sufrir la amputación de uno de sus dedos. Desconozco a ciencia cierta, en qué momento de la irracional gresca, le sucedió tal lesión ni cómo se produjo. 
Por lo pronto y, merced a la gentil colaboración del colega y amigo, Alejandro Fernández, a quien agradezco infinitamente valioso aporte, he recabado datos que indican que el Escudero, está internado en una de las clínicas de nuestra ciudad. Obviamente, llegado el caso, serán los facultativos médicos los que tomarán la decisión final. Y, de acuerdo a lo que se me señalara, ello podría suceder en las próximas horas, o bien, en días más. Tan solo ruego y espero, que no deba ser necesario.  
Dr. Juan Alberto "Beto" Gómez
Director General de Eventos & Marcas