Remontada y triunfazo de Mandiyú contra Curupay

No se rindió y tuvo su premio. Mandiyú mantuvo las energías hasta el final y concretó una valiosa reacción y victoria. Foto El Litoral
Mandiyú derrotó 3 a 2 a Curupay en un partidazo vivido en la tarde de domingo en la cancha de Huracán Corrientes. El Maderero necesitaba sumar de a tres para evitar que se le siga escapando Camba Cuá, ahora líder con ocho puntos de ventaja sobre sus perseguidores. Por el lado del Albo, volvió a ganar y esta vez de manera muy épica al remontar un 0 – 2 en contra con goles de Roberto Oviedo por duplicado y de Alexis Fleitas Miérez. José Fernández había abierto el marcador y Ariel Romero estirado la ventaja parcial para Curupay.
En un partido que fue de menor a mayor en cuanto a emociones e intensidad y con un terreno de juego que contó con el condimento de una llovizna previa al comienzo del cotejo, el que arrancó mejor fue Mandiyú. El Algodonero empezó presionando en la mitad de cancha y no dejaba jugar tranquilo a Curupay que encontraba en los despejes y pelotazos la única vía para pisar el área rival. El Albo tuvo las primeras oportunidades claras del partido, pero no las supo aprovechar y con el correr de los minutos dejo de dominar al Maderero. Ya no había juego y sólo una catástrofe dentro de una de las áreas abriría el marcador. Y fue así como en la última jugada del primer tiempo, tras un tiro libre ejecutado desde el costado izquierdo llegaría el 1 a 0 en favor de Curupay. Tras un despeje que quedó adentro del área, Fernández la agarró de volea y la mando a guardar contra el palo derecho del arquero Franco Hernández. Los buenos equipos golpean al principio y al final de cada tiempo.
Ya en la segunda mitad, Curupay salió decidido a ampliar la ventaja. Y a los 57 minutos de juego, en la única, y por lo tanto mejor jugada del Maderero, llegaría el segundo. Tras una gran acción colectiva que contó con lindos pases y un movimiento del balón de la banda derecha a la izquierda, el Chicle Romero se encontró con la posibilidad de meter un zurdazo letal. La cruzó toda y de manera rasante esa pelota entro por el palo izquierdo de Hernández. 2 a 0.
Curupay tenía tres suplentes en el banco. Uno de ellos arquero. Por lo tanto, solo tenía dos cambios de jugadores de campo que el entrenador Domingo Centurión tenía que aplicarlos inteligentemente. Contó con la desgracia de tener que gastar uno de ellos en el inicio del complemento, cuando Edgar Franco reemplazó a Gustavo Mendoza quien se retiró con una molestia física del partido. Esta situación de los cambios y el número de suplentes en el banco del Maderero fue clave. De algún u otro modo se sabía que este equipo la iba a pasar mal el resto del partido, y vaya si no fue así.
A los 78 minutos, Oviedo, que no venía teniendo un buen partido, colocó un zurdazo desde afuera del área que fue a media altura y que se coló por el palo izquierdo del arquero Ángel Torres. Gracias a este golazo, Mandiyú se inyectó una energía positiva que la volcó en su juego y que le permitió ir a la búsqueda de un empate que era impensado luego de que Curupay se había puesto en ventaja por dos goles de diferencia. El Albo se ponía al tiro del empate y todo podía pasar. Y así fue como a los 90, de tiro libre, Oviedo se permitió meter otro zurdazo, otro golazo. El Algodonero empataba el partido 2 a 2 luego de ir perdiendo 2 a 0. Todo lo hizo en un lapso de 12 minutos y gracias a la figura del partido, Oviedo. Si los buenos equipos golpean al principio y final de cada tiempo, los grandes jugadores aparecen cuando sus equipos mas lo necesitan. Y aún habría más.
Tras el empate, en Curupay se fue expulsado, por protestar, Gustavo Fernández Benítez. Y aprovechando el hombre de más, Mandiyú se mandó una gran jugada de ataque, la de la victoria. Pobló de jugadores algodoneros el área del Maderero y un Fleitas Miérez que estaba solo por el segundo palo cruzó un zurdazo rasante que le dio el triunfo agónico al Albo. De esa manera se concretaba un regreso épico y que lo festejó con mucha euforia el público que se acercó hasta la cancha de Huracán a vivir lo que fue un partidazo. Tras el 3 a 2 definitivo se vivieron incidentes que involucraron jugadores y miembros del cuerpo técnico de Curupay, la terna arbitral y efectivos de seguridad. Aguardamos aún por el informe final del réferi Carlos Hidalgo, que decidió dar por terminado el encuentro en ese momento, y que nos dirá que jugadores del Maderero serán sancionados de cara a la próxima fecha.
Tras este fin de semana, Curupay queda con 22 puntos a ocho del líder Camba Cuá. El Maderero comparte segundo lugar con Ferroviario y, el sorpresivo, Invico. Por su parte, Mandiyú, tiene 18 unidades y en la próxima enfrentará al Tren Verde.
Autor: Maximiliano Álvarez Vallejos